lunes, 6 de agosto de 2012

Paula y Peter: “Somos una pareja común y corriente”


Pedro “Peter” Alfonso y Paula Chaves. En lo personal, viven una relación estable, y llevan una convivencia dividida en dos departamentos (uno en Las Cañitas y otro en Palermo).

En lo profesional, se mueven como una especie de amor-empresa: hacen dupla en “Bailando 2012” y protagonizan “Concubinos”, la sitcom de La cocina del Show. Claro que ser pareja sin bailarín profesional e incursionar en la actuación en TV no es casualidad. La “parejita feliz” que presentó Marcelo Tinelli, mide buen rating en pantalla y corta tickets en teatro: vienen de ser la sorpresa de taquilla en la temporada de verano en Carlos Paz con Despedida de soltero, comedia que hoy llena el Teatro Picadilly. Ambos hablaron con el diario Perfil de su buen momento, y de un posible futuro en la actuación.

—Comparten cartelera con grosos: Alcón, Chávez, Pinti, Gasalla… ¿Qué les genera a ustedes que no son del palo?
ALFONSO: No hay que pensarlo demasiado. Entramos pidiendo permiso, con humildad, estamos aprendiendo, todos tuvieron su primera vez en la carrera y cada función es una escuela. No miramos para el costado en la calle Corrientes.

—Tinelli dijo que sos una gran actriz y te recomendó a Suar. ¿Te llamó el gerente de Programación de El Trece?
CHAVES: No sabía. Sé que mis managers Paul y Willy García Navarro siempre están hablando. Ojalá, y me encantaría que el día de mañana pueda hacer algo en Pol-ka. Toda mi vida soñé con ser actriz, y obviamente que me gustaría protagonizar, incursionar en otras productoras o en Ideas del Sur si hiciese ficción.

—¿Cuándo descubriste la vocación de actriz?
C: Siempre. Cuando era chica me metía en todos los actos de fin de año, siempre hacíamos concerts en inglés, estilo comedia musical. Hice de árbol, de perro y otras veces me gané el protagónico. Hice talleres de teatro, improvisación, estudié con Leandro Castello y en la escuela de Julio Chávez con Luz Palazón.

—¿No se les ocurre anotarse en el IUNA?
A:—Nos gustaría pero no tenemos tiempo. Es como los cantantes grosos que hasta el día de hoy siguen estudiando. Pau tiene más cosas de actriz. Yo estoy probando, viendo si funciono. Estudié teatro pero siempre fui muy tímido, nunca me presenté a un casting, antes me mato por la vergüenza. El tiempo dirá.

—Muchos quieren entrar al “Bailando” por los ingresos que genera, como el caso de las presencias; ¿le sirve a ustedes?
A: El año que bailé hice algunas presencias. Este año hice una en Carlos Paz.
C: No tenemos tiempo. Las presencias son en el interior, en boliches, y la gira del teatro nos chupaba mucho tiempo. Las presencias las hacen actores y modelos, y viven con presencias. Es normal.

—¿Pudieron ahorrar?
A: En las vacaciones nos gastamos unos buenos pesos. Pero no. En realidad trabajamos y tampoco somos millonarios, no ganamos una fortuna.
C: No. Trabajamos mucho y tenemos todo ganado perfectamente. Ayudamos mucho a nuestras familias. Mis padres están separados y les doy una mano a mi mamá y a mis hermanos. Me da placer hacerlo.
A: Mi familia siempre me ayudó a mí. Siempre fui muy vago hasta que hice un clic en mi cabeza y terminé la secundaria a los 23. Casi era un mantenido de mis viejos. Después, en todo lo que necesitan estoy. Estamos todo el día en contacto, los dos somos muy familieros, muy amigueros.

—Venís de Mármol y lograste una popularidad repentina. ¿Cómo le pegó a tu familia que tengas otros ingresos, que puedas ayudar?
A: Fue todo tan rápido y de golpe que no hubo ni tiempo de analizarlo. Un día entré a Ideas, canté, y a la salida me estaban pidiendo autógrafos. Una locura. En Mármol también. No conozco a todos los vecinos pero cuando voy me gusta caminar por el barrio. Mi viejo sigue en Mármol, mis hermanos por el centro, y trato de ir todos los fines de semana. Me encanta volver, como a Paula le gusta ir a Lobos.

—¿Cómo se llevan en la convivencia con tantas horas de trabajo juntos?
C: Re bien. Encontramos la fórmula perfecta de poder estar los dos tranquilos. Cuando trabajamos somos compañeros, y en Ideas del Sur los dos tenemos nuestros camarines separados y nos encontramos al momento de bailar. Lo mismo en el teatro. Tratamos de tener nuestros espacios y no es que estamos como dos siameses todo el tiempo “cuchi cuchi, mua, mua”. Somos una pareja común y corriente.

Hoy, el eje mediático de ShowMatch hace pie en Charlotte Caniggia. “Es muy graciosa. Es una nena, muy chica, tiene todo de la adolescencia. No debe saber ni dónde está, quiénes somos. Estamos en el pasillo por salir a la sentencia y la ves paradita, sonriendo, saludando a todos, tiene re buena onda. Es súper amorosa, copada, vino a pasarla bien, divertirse”, dice Paula.

—¿No genera polémica y contradicción la ostentación y que mida en el rating?
A: La gente lo mira por las dos cosas. No lo veo como una ostentación agresiva, y tampoco es cuestión de esconder lo que tiene. Uno puede opinar si está bien o está mal pero reitero que no lo veo como algo agresivo de “mirá lo que tengo y vos no”. Ella vive de esa manera.
C: A la gente le gusta ver cosas que luce Mariana (Nannis), qué vestido, qué zapatos, si Charlotte comió locro, si probó fernet. En su momento pasó con Fort. Les divierte la vida inalcanzable. Una mujer está en su casa y dice “qué bueno sería tener esos zapatos, esos vestidos”. Yo como mujer miro la ropa que usa Charlotte, me divierte cuando está con el clan: sus asistentes, los Báez, DJ Piloto, su madre. Es gente muy respetuosa.

Fuente: diario perfil


No hay comentarios:

Publicar un comentario